martes, 4 de diciembre de 2012

El inmaduro

La inmadurez se entiende como : Ser un crío, un imberbe, un inexperto, un pendejo...
Un crío, sin embargo, conserva algo así como... un espíritu aventurero e inocente. Y el inocente conserva su inherente curiosidad. Todo lo ve con ojos inquisitivos, por que al curioso el mundo le llama la atención y lo sorprende.
Un crío ríe con plenitud por que no tiene razones lógicas para hacerlo, y eso es maravilloso. Disfruta y vive como nadie puede.
El curioso inmaduro puede ser... tierno. Así como un gran terco al indagar lo que le rodea. Pero está bien en estas personitas. Y voy a resaltar una gran diferencia entre este tipo de inmaduro y el inmaduro que se justifica con un eterno "No voy a crecer, no quiero hacerlo".
La persona que conserva en su interior un Principito indagador e inocente, lleno de amor, se ennoblece en espíritu y crece con su alma...pero crece. Crece enriquecido de sentimientos puros y momentos (buenos o malos) que sabe son invaluables y no olvidará.

Un crío que no quiere crecer y se justifica en ello, es sólo eso. Un pendejito más en el mundo. Que está vacío...

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